la vida ordinaria y la santidad

guillermo 02.05.2017
ayer le dije a Dios, que no me diga el futuro. Bastante llega ya con el pasado y sobre todo con el presente. Cuando estábamos en la mili, te nombraban y había un grito de contestación: PRESENTE. Pues así debemos de vivir la vida en un continuo presente, pero estamos sometidos al paso del tiempo y el lugar. Este fin de semana pasado un sobrino mío, ganaron con su equipo el campeonato de España de bateles en Bilbao. Para el que no sepa lo que es, batel es una barca de la que hay 4 remeros (varones) y un timonel. En este caso era una mujer, la que hacía de timoner.
Y el equipo en el que milito yo de ajedrez bajó de primera división en la liga gallega a segunda división. El próximo año, menos desplazamientos y los contarios serán más jóvenes. Que se le va a hacer.

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